1) Qué comprar en Oporto: ¡Vinho!
Todo tipo de licor puedes adquirir, si no vas a viajar luego en avión, en la famosa Garrafeira do Carmo que se anuncia en TripAdvisor pero que a mí me descubrió el poeta Miguel D´Ors, lo que conlleva mucho más glamour y verosimilitud...
Está como su nombre indica en frente de la sublime iglesia del Carmo, y te dan a probar lo que desees antes de comprar así que según las tentadoras palabras del poeta, "sales de allí ya moñao, pero con una moñadura de calidad".
Y no, yo no soy casi nada alcohólica (sólo me trasegué cinco chupitos de tequila la noche que celebrábamos uno de mis premios poéticos, que seguro viene ahora alguno de mis amigos poetas y me lo recuerda...), pero al lado está la pastelería Primar que, para mis males, me tienta mucho más.
Pero es que mirad el panorama. Te sientas a saborear un espectacular merengue por cincuenta céntimos, ¡cincuenta céntimos en un sitio turístico!, mientras contemplas la belleza de las dos iglesias barrocas más majestuosas de todo Oporto. De aquí, al Cielo.
De hecho acabáis de ver en esta imagen la cara de la felicidad, sin gota de maquillaje: todo esto para decir que por el vinho yo no me perderé, pero por el azúcar, un poquito. Menos mal que cenamos verdura en casa y subimos cuestas como descosidas.
Y ahora seguimos la crónica.
2) Qué comprar en Oporto: Libros y "cosas monas".
Hay muchísimas librerías de viejo y, junto a la mítica librería de Harry Potter que aún no hemos visto, y sin salir de la zona cercana al Carmo, está esta “Fábrica e armazen Carmelitas”:
Que tiene de todo pero "mono" y caro: cajas de latón. Botellas de cristal pintado y de termo para beber agua y huir del malvado plástico. Deliciosos cochechitos retro que tienen escrito el nombre de mis sobrinos con letras de neón. Y la versión portuguesa de de las famosas Havaianas que se llaman así, As portuguesas, y tienen la suela de corcho (otro material para comprar en Oporto) y llevan en cambio mi nombre escrito:
3) Qué comprar en Oporto: tejidos.
Aquí los retales se venden en un set para hacer Pachwork por tres euros y son tan bellos que te parece un regalo, y las mercerías son obras de arte. Hay dos en Rúa Das Flores, que es la calle comercial pero con sabor más local, absolutamente maravillosas:
Una que se llama Retroseria das flores a la que entramos por lana y elástico pero que tenía mil cosas bonitas,y otra llamada Memoria que vende también telas pero es más bien bazar y donde compré, ¡por cinco euros!, este Cristo de cerámica que preside mi mesa de trabajo:
Porque por las mañanas, yo, trabajo. Y todo. Pero con esta adquisición llegamos a un nuevo nivel:
4) Qué comprar en Oporto: ¡Cerámica!
La cerámica portuguesa es fabulosa, y en las tiendas más turísticas abundan los motivos vegetales que están de moda como en todos los sitios, pero aquí hay diversidad y originalidad. Y no tienes por qué irte a grandes jarrones o a maravillosas fichas de ajedrez...
Sino a pequeñas piezas adorables de bisutería, muy especiales y diferentes: recomiendo una tienda que se ubica en la calle Mouzinho da Silveira 136 y se llama Prometeu: vende figuras, azulejos y todo tipo de dijes con motivos oníricos o folclóricos, pero claro...
...El corazón quiere lo que quiere, dijo el Mentalista, y a mí los ojos se me van a las hojas. He conseguido por ocho y cinco euros respectivamente un anillo y un colgante de finas planchas de cerámica esmaltada en forma de hoja otoñal...
Por último, aunque de esto hablaré en otras crónicas menos largas y minuciosas para no morir de mataros de agotamiento, ahí va la quinta sección:
5) Qué comprar en Oporto: ¡Cosmética!
Aún no he logrado dar con maquillaje portugués pero sí con una perfumería muy surtida de cremas Made in Portugal en la Rúa Santa Catarina, la más cosmopolita y comercial.
Y, en Rúa Das Flores, encontré un local precioso de Claus Porto, casa artesanal de jabones que sí es originaria de aquí:
Es una firma exclusiva, cara, como puede ser Santa Maria Novella en Italia, pero me arrebató la exposición de jabones protegidos por campanas de cristal que puedes manipular para aspirar todo el aroma: si al fin caigo con alguno, sería Almond Milk que mezcla el olor a limpio y a vainilla, sencillo y evocador.
¡La isla de las tentaciones!
ResponderEliminarNo, porque no es una isla XD
A mí en la pastelería no, es más fácil que me encuentres probando un vino que un merengue (tampoco es que beba vino cada día, pero cada una tiene sus preferencias)
ResponderEliminarMe encanta la hoja del anillo. Es preciosa. Besos!
Ys, ya sé que a ti el azúcar no te tienta. Feliz tú:)
EliminarFan total de tus crónicas viajeras!!Muy amenas :):)Me quedo con esa pasteleria dónde comer dulces típicos a 50 cents y disponer de esas vistas maravillosas...Ahh tb los jabones me llaman la atención...Muy tú el anillo en forma de hoja , precioso.Besosss!!!
ResponderEliminarLlegando el final de mes (y el cobro de la nómina ) me haré con algún jabón y le haré reportaje a la firma y a la tienda que es preciosa.
EliminarVoy muy pronto a Oporto, así que tus recomendaciones me vienen fenomenal!
ResponderEliminarEme
Habrá más, ja, ja, ja. Me alegra serte útil.
EliminarOhhh Q ganas de ir 💕💕
ResponderEliminarCada día te pareces más a la muñequita de los caramelos Milky de Fujiya.
ResponderEliminarMmmm, no sé si eso es bueno o malo: ¡tengo miedo!
EliminarQué gracia y qué adecuado el nombre de "guía de vicios". Yo de uno de mis viajes de Portugal me traje 3 golondrinas preciosas, de cerámica, que tengo en un rincón especial de mi dormitorio.
ResponderEliminarMe ha gustado mucho tu recopilación.
Besitos.
El merengue desde luego no es para mí, no soy muy golosa y de merengue ¡menos! ja ja ja
ResponderEliminarLos jabones tienen muy buena pinta
Besos