Hace mucho que no hablamos de Nars

Hace mucho que no hablamos de Nars..., y en los últimos días he comprado y he regalado productos de la que, no nos olvidemos, era y sigue siendo mi firma de lujo favorita 

Cada vez que paso por Sevilla, no puedo evitar pasarme también por el rincón que la marca posee en Nars Nervión, donde reina en solitario, majestuosa y magistral, mi amiga Yolanda, que siempre me maquilla por amor al arte y me muestra las novedades... en las que suelo, gloriosamente, caer.

Es verdad que suelen ser compras muyyyyyy pensadas, porque Nars ya tiene un precio y no se presta a la compra compulsiva...

En esta ocasión llevaba ya mucho tiempo queriendo conseguir el Afterglow Lip Balm en el tono Torrid, pues estoy virando hacia los melocotones más claros y hacia la hidratación labial masiva.

También tenía ganas de probar con tranquilidad los ya no tan nuevos Afterglow liquid blush, y comprobar si todos desaparecen en mi piel como lo hace el ubicuo Orgasm, un regalo al que con tristeza he tenido que decir adiós.

Hay tonalidades que yo no había visto cuando llegó la novedad, y Yoli me probó en una mejilla el Behave, un precioso malva claro, y el Secret Lover.

Un rosa alegre y vivo, un tono sandía fresco que grita verano y por supuesto me encantó. Vedlo aquí a juego con el lip balm Torrid que, dejadme decir desde ahora, me muero de amor por él..., y es un amor de los que no duelen, de los correspondidos.

Sin embargo, en un ejercicio de cautela decidí esperar a ver cómo se asentaba en mi piel. 

Es cierto  que no lo sellamos con nada, pero el preciosísimo Secret Lover desaparece también en mis mejillas a la velocidad de la luz.

Sólo unas horas después éste es su aspecto, con algo de trampita porque tuve que poner encima un poco del colorete en barra de Zara que se parece al Orgasm. Bonito y lleno de frescura se ve, 38 euros no creo que los merezca.

Debo decir que no es problema de Nars, los coloretes líquidos y yo no somos uno. En cambio ya sabéis que mis párpados aman las sombras de ojos fijas en barrita,  Jumbo como decíamos antes  o stick, que decimos ahora.

Y Nars ha lanzado toda una colección de colores mates y ultra fijos que por supuesto quería yo catar.

En el maquillaje que me hizo Yoli predominaba el tono Fated, y así estaba yo predestinada a salir de mi zona de confort con este morado oscurísimo y ultra mate que tan fácil es de difuminar en el párpado y conseguir una mirada profunda y unos ojos vestidos al momento. 

Se trabaja muy bien, pero hay que hacerlo rapidito porque fija en pocos segundos, y se ha venido a mi neceser de cabeza, me tiene subyugada.

Como estábamos en los días de belleza del Corte inglés, esta comprita generó un vale de 13 euros que me han venido muy bien para reponer productos de parafarmacia, y yo a mi vez  he regalado un par de productos de Nars que rodaban por mi tocador sin apenas uso: 

El antes mencionado colorete líquido Orgasm, y el Powermatte lipstick en el tono Dragón Girl que han ido a parar a la madre de mi mejor amiga por su cumpleaños. no digo que no me haya costado desprenderme de ellos, pero a la homenajeada le han vuelto loca de alegría, y estamos aquí para comprar maquillaje... y para hacer felices a los demás.