Lo de Bourjois este otoño: nuevos coloretes Macaron melt, nuevos labiales Butter tint

Regreso a mis esencias con un título de post bien largo..., y con Bourjois.

 

Oooops they did it again!

Bourjois fue la primera marca de maquillaje que usé de adolescente: compartía con mi madre su sombra de ojos Marrón glacé, dulce e hipnótica, y con mi propia paga compré la primera barra de labios melocotón que tuve en la vida, que  se llamaba, efectivamente, Par la vie. 

Eso, por no hablar de sus mítiquísimas polveras de colorete, objeto de culto de toda una época. Recuerdo los ansiados tonos Rose y Lilas d'Or...

Novedades de Bourjois

Pues... ¡nuestra polvera ha vuelto a la primera fila del mundo beauty, pero modernizada por dentro y por fuera!

Ya en primavera Bourjois, una marca de calidad y con cierta aureola retro pero que no solía darnos muchas novedades sorprendió con una base de maquillaje con pigmentos encapsulados en bolitas tipo la Eau de teint de Chanel, pero ese formato nunca me tentó.

Sin embargo, una nueva versión de sus rubores, con la clásica polvera ahora modernizada, un nombre dulce y apetecible y una textura en bálsamo pero no grasa...,  ¿a quien no le va a gustar? 

Adorable Peach Tatin 

Esta novedad sonaba desde el fin del verano, pero fue en octubre y en Sevilla cuando decidí acercarme a uno de los muchos locales de Druni para hacerme con el número tres de la colección, que por supuesto es un melocotón adorablemente goloso que se llama Peach Tatin, y que, obviamente, es mi tono. 

Decidí acompañarlo con su otro lanzamiento, y me hice con dos de sus nuevos Butter tint Glazebalm, labiales tipo bálsamo, de envase al estilo Touch eclat de YSL, el típico tubito con botón en un extremo que ya había patentado Tarte en modo labial.

En realidad compré dos para regalar uno, pues el tono Rose Fondant me pareció perfecto para una amiga que celebraba su cumpleaños por entonces. Para mí adquirí un color que se me hacía muy otoñal: el número 5 Caramel Flambée, que supone un ejercicio de salir y a la vez no salir de mi zona de confort, pues en mis labios tiene ese tono anaranjado que me gusta, pero es mucho más oscuro, cálido y dulce que mis melocotones usuales, porque no es melocotón... ¡sino caramelo!

Puro otoño en mi boca. Y ahora paso a hablaros de cómo queda la combinación de ambos colores (y texturas) en mi piel: 

Peach Tatin, melocotón en este renovado formato bálsamo, me chifla, porque aporta ese rubor alegre y soleado que siempre busco, y porque se ve que es crema pero para nada es grasiento, de hecho asienta en las mejillas con un acabado más bien mate pero jugoso a la vez, lo que las youtubers de belleza dan en llamar "mate moderno":

Alegría de vivir 

El labial, en cambio, es a todas luces brillante, hidratante, se derrite en la boca, hace honor a su nombre de mantequilla. Me parece perfecto para la temporada de frío, porque en verano y en Sevilla por ejemplo de medida que también se derritiera en el envase.

... En Sevilla 

Aquí os dejo una foto muy bonita de mis pasados días en Sevilla, en el soleado mes de octubre, junto a la Torre del oro, y maquillada con mis novedades de Bourjois, que no son eternas en la piel pero dan una buenísima duración.