El sueño de una noche de Logroño: descubriendo "Pan blanco"

6/03/2014
Una de las cosas que me enamoran de la ciudad en la que vivo es la creatividad de su ayuntamiento, del Gobierno de La Rioja y de otras instituciones para fomentar la cultura, el turismo y el comercio.

En Logroño se celebran anualmente festivales como Actual, de música y cine punteros; las jornadas de abril y el Agosto clandestino, en cuanto a poesía; el Aula cultural de La Rioja y UNIR cada mes, talleres organizados por la revista Fábula y catas de vino y literatura que suele ofertar la editorial Buscarini en el Ateneo...
En los últimos tres años han venido a Logroño Russian red, Fangoria, Dani Martín, Carmen Posadas, Karmelo C. Iribarren..., y todo esto en una ciudad pequeña y cómoda.

Cartel de El sueño de una noche de Logroño

Y con el comercio ocurre lo mismo. Se suceden las políticas simpáticas e imaginativas para reactivarlo, como la campaña "Compra en positivo" o lo que aconteció la noche del 30 del pasado mayo: una vez al año las tiendas que desean secundar este proyecto abren hasta las diez y ofrecen suculentos descuentos y alguna que otra golosina a sus clientes en una noche de primavera que parece no terminar.

Escaparate de Pan blanco en c/ Doctores Castroviejo

Lo mejor de estas propuestas es que te sumergen en la intrahistoria de la ciudad en la que vives.
Paseando por la calle con mis tíos descubrí una tienda multimarca pero con el sabor vintage que posee un pequeño comercio. Doctores Castroviejo era para mí la calle de la perfumería Prieto, de la librería Santos Ochoa y de firmas como Roberto Verino, Salvador Bachiller o Nice Things... y nunca había reparado en esta joya artesanal y única.

Detalle de mobiliario

Así son los probadores

Pan blanco es una tienda llena de originalidades y a la vez, nada más entrar te sientes como en casa...

Así empaquetan para regalar...

Detalle de la tienda

Capazos,  camisetas con mensaje, vestiditos "lady", vaqueros artísticamente rotos y colgantes de mariposas se ofrecen a nuestra vista, y los precios son bastante razonables. Y tienen un blog:

Bailarinas de Butterflytwists

Sin duda me quedo con las gafas de Mr. Boho que vi en el escaparate, y con estas bailarinas plegables que te sacan de un apuro en cualquier evento.  Las firma Butterflytwists y cuestan solo treinta euros.
Pero lo mejor es la atención y la sonrisa de su dueña, ¡que cuando me iba a marchar ya descubrí que era cuñada de una de mis amigas de la universidad!

10 comentarios:

  1. Sin duda, unos momentos fantásticos descubriendo pequeños rincones llenos de encanto.
    Un besazo!

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    1. Son los mejores momentos, Gadi. Con familia y amigos, buen tiempo y tiendas así...

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  2. Un rinconcito lleno de encanto, de esos de entrar y perderte,
    La bailarinas son preciosas.
    Un beso.

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    1. Mi tía se compró unas en rosa metalizado. Yo me las probé, pero tengo el empeine alto y las bailarinas no son para mí, prefiero las slippers.

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  3. Es una pena, pero muchas veces no conocemos los rincones más bonitos de nuestra ciudad porque siempre hacemos las mismas rutas.
    Besos!

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  4. Ese zapato celofán me ha llegado a la patata.

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  5. Que tienda más encantadora...voy a darme una vuelta por su blog

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  6. Esas gafas son chulísima pero es que el escaparate y los interiores son lo más.

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  7. Muy cuki! lo del celofán me parece lo más!!

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  8. Cuando vaya para allí entraré en esa tienda Es preciosa.

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